lunes, 28 de julio de 2008

Perú y Bolivia divididos por el turismo


El problema suscitado en los últimos meses por los transportistas bolivianos que cerraron el paso en la frontera a las empresas de transporte turísticos peruanos que cubrían la tuta internacional Kazani-Copacabana Perú-Bolivia, arguyendo argumentos que en muchos de los casos eran falsos; nos llevó a indagar del por qué existían estos problemas cuando existe un convenio de reciprocidad entre ambas naciones.

Y por reciprocidad nosotros entendemos equidad en todo el sentido de la palabra. Sin embargo, grande fue la sorpresa cuando la realidad nos muestra otra cara. En ese sentido y en cumplimiento de nuestra tarea de indagar sobre el servicio de transporte turístico internacional que brindan ambos países dentro del marco del convenio bilateral, es que encontramos aún más hechos que hacen desigual a este marco de reciprocidad.

En diálogo con expertos sobre el tema nos dieron a conocer que el convenio de reciprocidad de transporte internacional de turismo no era nada mutuo, puesto que las empresas peruanas sólo están autorizadas a ingresar hasta la ciudad de Copacabana (Bolivia), más no a otros departamentos del vecino país.

Sin embargo, las empresas de transporte internacional de turismo de Bolivia ingresan como “pedro a su casa” no solamente a la región Puno, sino a los departamentos de Lima, Cusco, Tacna y otras regiones trayendo consigo pasajeros extranjeros. La observación no es tanto a los turistas que arriban a nuestro departamento, si no de la inequidad que existe en el recorrido de las provincias en el territorio boliviano.

Según nuestros entrevistados, el recorrido de kilometraje de las empresas de transporte debería ser por igual. Vale decir, si el convenio consiste en recorrido de 500 kilómetros, en ambos países debería ser lo mismo; lo que no sucede en Bolivia donde las empresas de transporte de turismo del Perú son restringidos en su recorrido que en la actualidad solo pueden hacer servicio hasta la ciudad de Copacabana.

Razones

El motivo principal es que las empresas de transporte de turismo de Bolivia son los que quieren exclusivamente hacer el traslado a los turistas extranjeros que arriban al vecino país de la ciudad de Puno, a la diferentes provincias. De esa manera vetar el paso a empresas peruanas que no pueden entrar con los pasajeros hacia otros lugares como la Paz, Sucre y algunos lugares que los visitantes deseen conocer.

En ese sentido nos preguntamos ¿Por qué las empresas bolivianas si pueden circular hasta la ciudad de Cusco, Lima y otras regiones. Y las empresas peruanas no? La respuesta según nuestros consultados y entendidos en materia turística, es que los gobiernos de turno tienen lobbys y en peor de los casos los gobiernos de turno nunca reclamaron siendo hasta complacientes con los bolivianos. Mientras que Bolivia cierra las puertas a los peruanos en servicio de transporte internacional según algunos empresarios de turismo de la ciudad, el Perú le abre sus puertas, hasta llegar a Lima.
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Otra de las explicaciones es que el turismo boliviano vive del turismo peruano, es decir que si no fuera por Machupicchu y las islas flotantes del Titicaca situado en Puno; sencillamente la presencia turística en Bolivia sería mínimo. Al respecto, José Huanca Tonconi, Director de Turismo de la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo (DIRCETUR), refiere que de los 180 mil turistas que visitan anualmente Puno, más del 45 por ciento se dirigen a Bolivia a conocer los atractivos turísticos del Titicaca del lado boliviano.

En tanto, para otros expertos del 100 por ciento de turistas recibe anualmente Bolivia, el 70% vienen a visitar a las Islas Flotantes de Uros, Taquile y Amantani del Lago Titicaca del lado peruano. Es por eso que se dice que el turismo boliviano vive del turismo peruano se relaciona perfectamente con el dicho “El vivo vive del sonso y el sonso de su trabajo”. Cuando las empresas bolivianas de turismo entran al Perú cuando quieren y a donde quieren. Mientras las empresas de turismo peruanas solo pueden llegar hasta Copacamaba entonces ¿Donde queda la reciprocidad?.

Según el director de turismo de la DIRCETUR, 1 millón 800 mil extranjeros arriban a nuestro país anualmente. Del cual un millón 200 mil van con destino a Machupicchu-(Cusco) de los cuales 180 mil se dirigen a las Islas Flotantes del Lago (Puno) al año. “De Bolivia también ingresan turistas de hecho que es otra ruta, pero es mínimo. Para los ojos del mundo el destino turístico es Machupicchu-Perú, Luego Lago Titicaca (Puno) a nivel de Sudamérica”, explicó el funcionario.

Titicaca conocido como Bolivia
Otro tema importante es que los países europeos conocen al Titicaca como si fuera exclusivamente de Bolivia, ignorando que gran parte de la extensión del candidato a la maravilla natural del mundo pertenece al Perú. Ello fundamentalmente por los gobiernos de turno que a través de las carteras ministeriales de turismo solo promocionaron a Machupicchu como destino turístico; dejando de lado al milenario Lago Sagrado de los Incas, pese que es considerado a nivel mundial como segundo destino turístico a nivel de Sudamérica.

“Eso es la pura verdad, por ejemplo las empresas turísticas nacionales durante años solo ha promocionado al Machupicchu eso se puede ver en las páginas Webs. Sin embargo, el Gobierno Boliviano supo aprovechar al máximo promocionando al Tititicaca como si fuera de ellos únicamente, que en la actualidad es conocido en los países del mundo así lamentablemente”, indicó, Huanca Tonconi.

Lo que significa que no solo Chile se apropia de nuestros productos oriundos del país como el Pisco ahora la Papa. Sino Bolivia también está en ese camino por que ya construyó las islas flotantes con la finalidad de atraer más turistas queriéndonos “pisar el poncho” a los puneños y peruanos a vista y paciencia de las autoridades que no hicieron, no hacen ni harán algo al respecto. Muy por el contrario seguramente avalarán estos actos como en el caso del servicio de transporte internacional.

Para el funcionario del DIRCETUR, el turismo es fundamental en el aporte económico de la ciudad de Puno, dado que cada turista gasta 100 dólares diarios y los 180 mil visitantes que recibe anualmente la ciudad la mayoría ellos europeos, se quedan en promedio un día a un día y medio, y algunos logran quedarse más de dos días visitando los diferentes atractivos turísticos de la región Puno.

En ese camino, el objetivo del País, para el 2015 es que arriben 5 millones de turistas anuales, de ello visiten a Puno cinco millones. Propósito que como refiere, Huanca Tonconi, se cumplirá siempre en cuando promocionemos al Lago Titicaca como destino turístico y lo más importante que países europeos y asiáticos que más visitan a Puno tengan en mente que el majestuoso Titicaca se encuentra en Perú-Puno, donde se hallan las verdaderas islas como: los Uros, Amantani, Taquile, Suasi y otros.

Si mencionados a los lugares turísticos con que cuenta la región la lista sería interminable, pero solo nos limitaremos a citar algunos lugares como las Chullpas de Sillustani, Tinajani (Ayaviri), catedral de Lampa, templo de fertilidad (Chuicuito-Juli), que se proyectan a ser los futuros centros turísticos.

Puno no sabe promocionar atractivos
Los expertos señalan que las autoridades de Puno y entidades comprendidas en turismo no saben promocionar los atractivos turísticos de la región por la inconciencia e ignorancia del tema turístico. Aunado a ello la inercia e indiferencia de la población que todavía no comprenden que el turismo es una fuente de ingreso económico según explicaron los profesionales.

Para sustentar lo referido pusieron como ejemplo lo que viene sucediendo con la candidatura del lago Titicaca a ser una de las maravillas naturales del mundo. Donde las votaciones fueron emitidas en mayor porcentaje por los bolivianos y como puneños y peruanos aportamos la mínima parte. Siendo motivo, para que el Titicaca descienda de posición al lugar 21 cuando se encontraba ubicado entre los primeros lugares.

En fin, lo cierto es que en este rubro el descontento es por ambas naciones, por culpa de las autoridades que no tienen la firmeza de hacer cumplir los acuerdos al pie de la letra. Que aunado a la indiferencia de la población e instituciones nuestro lago Titicaca terminará siendo como destino turístico de los bolivianos. Pero algunas entidades percibieron jugosos presupuestos so pretexto de promocionar al Lago que en la práctica solo terminaron promocionando muy bien, pero muy bien sus bolsillos.